domingo, 30 de diciembre de 2012

2012

Ya ha pasado un año mas, casi sin darme cuenta y estoy justo donde el año pasado, mejor con las personas a las que quiero y sin muchas del pasado. Un año mas, solo mas tiempo...


365 días de darme cuenta de que los amigos de verdad se cuentan con una mano y que es mucho mejor estar solo que mal acompañado.
365 días para darme cuenta de que no importa cuanto tiempo este sin ver a alguien especial que cuando lo vuelva a ver volveré a sentir la misma conexión de siempre.
356 días de quitarme puñaladas traperas de la espalda.
365 días de no cumplir mis sueños.
365 días de hacer locuras.
365 días de discusiones y reconciliaciones.
365 días de ser cruel y luego compensarlo con ser buena.
365 días en los que he sonreído aunque por dentro estuviera  jodida.
365 días de volver a creer en el amor y en el "nunca digas nunca"
365 de enamorarme, desenamorare y volverme a enamorar de nuevo.
356 días de desarrollar mis teorías del Karma.
365 días para conseguir no estar nada confusa sobre lo que siento. 0 dudas.
365 días de madurar poco a poco.
365 días en los que no me he rendido.
365 días mas cerca de ser quien quiero ser
365 días mas cerca de la libertad.
365 de continuar siendo yo, con mis defectos, manías y virtudes.
365 días mas de historias de vampiros.

Y en 2013 serán 365 días para afrontar nuevos retos, nuevos retos de mi complicada vida de inmortal.

Feliz año para todos 

viernes, 14 de diciembre de 2012

Han cambiado tantas cosas:

Ya no me importa quedarme en Valencia o no; que me dejen volver a casa, mi casa, la de siempre; ya no me importa que no que me llamen y para preguntarme "que tal la semana? como estás?"; ni me importa el echo de estar un viernes por la noche en casa y de saber que me quedan muchos fines de semana en casa castigada por a ver sido alguien muy malo en otra vida; tampoco me importa el echo de que mi mejor amiga no tenga tiempo para mi o el echo de que casi nadie de las personas con las que iba tenga ganas de verme. 

Supongo que tampoco soy la de antes, la que siempre estaba dispuesta a salir, la que no quería/ podía enamorarse, la que siempre estaba confusa, la que cambiaba de opinión cada semana, la que hablaba mas de la cuenta. Me he cansado de la gente, de pensar en quien no  piensa en mi. 

Ahora he aprendido a querer solo a quien me quiere , a decidir por mi, a no llorar por nada ni nadie, a no echar de menos... 
Ahora veo las cosas mucho mas claras, aunque depende de el día de un color o de otro.

 Pero mi miedo al futuro continua ahí, al futuro, a la incertidumbre, a no ser quien quiero, a no cumplir ninguno de mis sueños, a la soledad... A lo mejor si se acaba el mundo nos  hace un favor.