Navidad

¿Y si os digo que no tengo ganas de navidad? Que la navidad es un "me moría de ganas de ganas de veros y de abrazaros y de daros un beso" pero yo no siento nada de eso. Recuerdo cuando tenía 10 años y contaba los días que quedaban para vacaciones, para nochebuena y para navidad. Abría los regalos antes de tiempo, aun cuando sabia que los compraba mi madre y sabia lo que había dentro de los paquetes. Ahora ya no hay ni regalos, ni está mi madre, ni tengo ilusión, ni siento amor, ni siento "navidad". 

La felicidad...

"La felicidad no es un juego de azar, es un trabajo a tiempo completo. Una partida de poker, que combina algo de suerte con mucha estadistica. La felicidad es algo en lo que inviertes con acciones, con maneras de pensar, con la forma que uno tiene de manejar sus enfados, gestionar los insultos y aceptar las desgracias. La felicidad es saber ganar y perder. La felicidad no depende de que tengas todos los brazos y  todas las piernas si no de cómo utilices los que te quedan."

Mi primer viaje a Alemania: Dordmunt.

Hace un par de meses ni siquiera me lo hubiese planteado. ¿Alemania? ¿Frío? ¿Lluvia? ¿lugares grises? No, gracias. Pero el echo de encontrar un vuelo de ida y vuelta por 35 euros te cambia el chip, se te ilumina una lucecita. Y más cuando cuatro chicas geniales se unen al plan. 

Que me alegro de que hace 3 años me equivocara de clase, benditos mis despistes aunque digáis que no tengo remedio, porque sin ellos no nos hubiéramos conocid. Bonito destino. 

Que ni el frió, ni la lluvia, ni la distancia nos han impedido pasarnos lo estupendamente, ver sitios preciosos, morir de amor infinitamente y continuamente, reírnos como locas y bailar como si se acabara el mundo. 

Demasiadas ciudades preciosas en el mundo para pasarse la vida en el mismo sitio. 

Acabamos de llegar a casa y ya estamos soñando con otro viaje con destino definido.

Que soñamos para vivir, que vivimos para soñar.